EL DISFRAZ QUE OCULTA LA ADICCIÓN LABORAL

12 Febrero 2024

¡Hola de nuevo, coachee! Esperamos que estés muy bien.

Esta vez, y siguiendo en la línea del ámbito laboral, vamos a emprender un viaje de reflexión para ahondar en un tema que afecta a muchas personas en nuestra sociedad; el exceso de trabajo disfrazado.
Y es que, en nuestros días, el afán por el éxito y la productividad pueden convertirse en una trampa para nuestra salud mental, física y emocional. Y ya es hora de que pongamos las cartas sobre la mesa, ¿no crees?

Para empezar, debes saber que sumergirte en tu trabajo puede ser apasionante y gratificante (a nosotros nos encanta), pero también puede ocultar una realidad preocupante, como la adicción laboral, el estrés crónico y la desconexión con nuestro propósito de vida.
Por eso, y porque es posible que estés viviendo una situación de sobrecarga laboral que no te permite desconectar de las tareas, en el post de hoy queremos desvelar lo que hay detrás de las máscaras y los disfraces, aprovechando que ya estamos en carnaval.

Y es que sí, coachee, el exceso de trabajo puede adoptar varias máscaras y disfraces y pasar casi desapercibido, pero es responsabilidad nuestra aprender a reconocer esos disfraces y poner límites que nos permitan vivir mejor y tener una vida plena, consciente y en armonía. Porque el trabajo es importante, por supuesto, pero no debe ser el único aspecto para definir nuestro bienestar y nuestra felicidad.

“Que tu trabajo sea uno de los pilares que engrandecen tu vida está muy bien, pero que nunca sea el único”

¿Estás listo/a para descubrir nuevas perspectivas sobre tu trabajo y empezar a tomar acciones para mejorar tu vida laboral y ganar serenidad?

¡Sigue leyendo un poco más, que empezamos!

 

ÍNDICE DEL CONTENIDO DEL POST

1. El afán por el éxito y la productividad se pueden convertir en una trampa

2. ¿Te sientes perdido/a en un mar de tareas?

3. Señales de riesgo; Descubre las "red flags" o banderas rojas del exceso de trabajo

4. ¡Tú tienes el poder de equilibrar tu vida!

 

¿Te sientes perdido/a en un mar de tareas?

Seguro que te ha pasado, y es posible que te esté pasando justo ahora. Todos nos hemos sentido inmersos en un mar de tareas interminables, y hemos acabado sacrificando nuestro bienestar y desconectándonos de nuestro propósito vital por querer llevarlo todo adelante. Y es que, en nuestra sociedad actual, el trabajo se ha convertido en un símbolo de éxito y validación personal.
Nos sumergimos en él día y noche, persiguiendo metas y olvidando el valor de la pausa que necesitamos para recargar pilas y de la necesidad de parar, reflexionar y recapacitar sobre los pasos que estamos dando. ¡Hacemos, hacemos y hacemos!

Pero, ¿qué ocurre cuando el trabajo se convierte en una adicción? ¿Qué ocurre cuando el estrés y la ansiedad se apoderan de nuestras vidas? Pues que todo empieza a ir hacia abajo y a una velocidad de vértigo, creando problemas y repercutiendo a todos los niveles.

Y es que el exceso de trabajo puede disfrazar una profunda desconexión con nuestro propósito y con nosotros mismos. Es como una cortina de humo que hace que nos perdamos en la tormenta de las responsabilidades y que dejemos de lado lo que realmente nos mueve. Y eso lleva a que, por mucho que nos esforcemos, no estemos consiguiendo lo que realmente deseamos.
Es como intentar cortar un árbol con un hacha desafilada. Nosotros somos el hacha, desafilada y desgastada de tanto trabajo, por lo que, por más esfuerzo que pongamos para cortar el árbol (que representa todas las tareas que tenemos que hacer), no lograremos resultados significativos que nos hagan sentirnos llenos.

¡Y ahí empieza un ciclo vicioso!

  • “Tengo que llegar, pero hago y no llego, o no llego como me gustaría”.

  • “Siento que no disfruto de lo que hago, lo hago porque no tengo más remedio que hacerlo”.

  • “Me paso el día haciendo cosas que no me hacen sentir satisfecho/a”.

  • “Me gusta, pero acabo muy cansado/a y no tengo tiempo para hacer otras cosas que quiero hacer”.

¿Te reconoces en alguna de estas afirmaciones? Seguro que sí, como nos ha pasado a todos. Pero no te preocupes, porque justo para eso estás aquí; para reconocer que tienes exceso de trabajo, para aprender a quitarte la máscara y para empezar a poner acción y mejorar tu vida.

¿Y cómo puedes empezar? Pues, en primer lugar, aprendiendo a identificar esas banderas rojas que hay en tu vida laboral y que te están advirtiendo que tienes un exceso de trabajo disfrazado. ¡Reconocer es siempre el primer punto!
Y es que saber cuáles son las banderas rojas y aprender a reconocerlas en tu vida te ayuda a evitar caer en la trampa del agotamiento laboral y a encaminarte, de una vez por todas, hacia tu bienestar.

¿Las vemos?

Señales de riesgo; descubre las “red flags” o banderas rojas del exceso de trabajo

¿Sabes qué son las banderas rojas? Son esas señales de riesgo que te dicen que algo no está yendo bien. Por eso, identificarlas te ayuda a reconocer que hay un problema al que tienes que ponerle solución.
Y es que reconocer tus banderas rojas es como tener una guía o una alarma interior que te indica qué está fallando. Digamos que es como una forma que tiene tu cuerpo y tu mente de indicarte que algo no está yendo como debería. Por eso, reconocer esas señales de riesgo es avanzar a pasos agigantados hacia la solución del problema y la mejora de tu vida laboral.

¿Vemos qué red flags puedes encontrar y con cuál de ellas te identificas?

  • Agotamiento constante:

    Cuando hay agotamiento persistente, es posible que te sientas cansado/a física, mental y emocionalmente de forma constante, incluso después de haber dormido lo suficiente.

  • Dificultad para desconectar:

    ¿Te resulta difícil desconectar del trabajo, ya sea mentalmente o físicamente, incluso fuera del horario laboral o durante las vacaciones? Tienes dificultad para desconectar y seguro que sientes que no consigues quitarte las preocupaciones de encima.

  • Priorización del trabajo sobre la salud:

    Quizás sientes que has descuidado tu salud física y emocional debido a las demandas laborales. Es posible que no comas adecuadamente, que lo hagas a deshoras, que duermas poco y mal y que ignores ciertos signos de estrés y ansiedad. Puedes sentirte como un robot. ¡Atento a las banderas rojas!

  • Falta de satisfacción:

    A pesar del esfuerzo y de toda la dedicación, quizás no te sientes satisfecho/a con los resultados de tu trabajo. Eso te puede llevar a un ciclo interminable de autocrítica, perfeccionismo y sentimiento de culpabilidad.

  • Reducción de la productividad:

    ¿Sientes una disminución en la eficacia de tu trabajo y que empeoras en calidad por querer hacerlo todo? Eso te lleva a caer en errores tontos y frecuentes por no prestar atención y hace que no puedas cumplir con las responsabilidades laborales debido a la fatiga.

  • Problemas de salud física y emocional:

    Puedes experimentar síntomas físicos, como dolores de cabeza, problemas gastrointestinales, insomnio, ansiedad o depresión como resultado del estrés crónico relacionado con el trabajo.

  • Deterioro en las relaciones personales:

     ¿Sientes una disminución en la calidad de las relaciones personales y sociales debido a la falta de tiempo y energía? Es posible que te repitas “no me da la vida, aunque quiera.”

¿Te reconoces en alguno de los puntos anteriores? Si es así, debes saber que tienes banderas rojas que indican que hay un exceso de trabajo en tu vida, y necesitas poner solución para mejorar en calidad y ganar bienestar.

Por eso, ahora que ya has explorado las señales de advertencia que se esconden detrás del exceso de trabajo, actuando como una máscara o un disfraz de carnaval, es hora de descubrir lo que te espera en el próximo capítulo de esta serie. ¡Te va a encantar!

¡Tú tienes el poder de equilibrar tu vida!

Ahora que ya conoces cuáles son las banderas rojas que anuncian un exceso de trabajo que te daña y te agota, y que las has reconocido en tu vida (¡genial!), queremos decirte que en el siguiente post vamos a enseñarte mucho más, y es que descubriremos contigo el método que usamos en Zurekin Coach para abordar el exceso de trabajo y ayudarte a parar, a reflexionar, a priorizar y a poner armonía laboral en tu vida.

Además, también aprenderás a redescubrir la chispa de tu vida, a revitalizar tus aspiraciones y a mantener la ilusión de alcanzar tus metas siempre viva y encendida, para que evites perderte en un mar de quehaceres que no te llenan y te estancan.
Y es que nuestro enfoque profesional te brindará la orientación necesaria para reconocer y analizar tu situación, entender tus desafíos y aprender estrategias probadas que te impulsarán hacia adelante, y no hacia atrás, como ocurre cuando hay sobrecarga de trabajo.

Porque sí, coachee, en Zurekin Coach creemos en el poder de un acompañamiento amable que te guíe hacia el camino correcto, manteniéndote motivado/a y enfocado/a en tus objetivos y contando siempre con nuestra mano amiga profesional, que está ahí para guiarte, acompañarte y celebrar contigo cualquier logro conseguido en el camino.

Y que estés aquí ya es un logro, un paso valiente y un acto que celebrar, ya que buscas formas de mejorar tu vida y nos permites seguir guiando tus acciones hacia el éxito personal y laboral. ¡Enhorabuena, coachee!

¿Estás listo para embarcarte en esta emocionante travesía hacia una vida más equilibrada, plena y llena de propósito? ¡Haz tu maleta y únete a nosotros en este viaje! Te espera un futuro brillante y lleno de posibilidades.

Vamos a descubrirlo juntos en el siguiente post.

¡Te vemos allí!

¿Quieres un cambio en tu vida?