¡Hola coachee! Qué bien seguir viéndote por este espacio.
Y qué bien poder compartir contigo un post tan alentador como el que vas a leer hoy. Porque hoy vamos a hablar de libertad, de alivio y de desahogo, y son cosas realmente muy positivas. ¿Por qué? Pues porque es lo que sientes cuando logras aprender a gestionar tus preocupaciones y poner solución a esas situaciones que te resultan difíciles de llevar hacia delante.
Y es que, en una sociedad tan ajetreada, es muy común que te dejes llevar por los problemas, los conflictos internos y las preocupaciones, y que normalices tanto la situación que aprendas a vivir con cansancio, con apatía, con malestar y con bloqueos. Pero déjame decirte que eso no es lo normal, coachee.
Por eso, en el post de hoy, vamos a analizar qué se siente cuando logras resolver tus preocupaciones y quitarte la mochila que llevas tanto tiempo arrastrando. ¡Porque no hay mejor sensación que esa!
¿Lo vemos? ¡Pues prepárate, que despegamos!
Las preocupaciones; una mochila invisible
En la sociedad en la que vivimos, es fácil caer en la dinámica de sentirse constantemente atrapado y ahogado por preocupaciones que resultan abrumadoras, que siempre están ahí y que parece que no pueden desaparecer ni con agua caliente.
Y es que, a veces, por problemas familiares, personales o empresariales, el peso de tus responsabilidades puede convertirse en una carga demasiado pesada de soportar, como una mochila llena de piedras que te agota y te impide avanzar. Y que, cuando logras avanzar algún paso, hace que tengas que pararte a descansar durante mucho tiempo, alargando cualquier proceso y haciendo que te sientas cada día más agotado.
¿Lo peor de todo esto? Que tendemos a normalizar estas situaciones y a pensar que vivir agotados, bloqueados, estresados, ansiosos, depresivos o apáticos es algo normal por llevar a cabo tantas responsabilidades. ¡Pero nada más alejado de la realidad! Porque vivir de esta forma no es normal, ni debería serlo para nadie.
Y es que, cuando vivimos momentos difíciles, la sensación de libertad y alivio parecen un sueño lejano y casi imposible de alcanzar. Incluso, a veces, ni siquiera pensamos en cómo nos sentiríamos sin esas preocupaciones. ¡Ahí está el problema!
¿Y qué ocurre entonces? Que aprendes a vivir atrapado en un ciclo interminable de malas sensaciones, de pensamientos intrusivos, de torbellinos mentales y de conflictos internos sin revolver, y todo eso hace que no te permitas o no puedas descansar. Y hace que sientas que llevas una mochila enorme cargada a la espalda y que cada día sea como una batalla cuesta arriba, o como una montaña insuperable donde no hay luz ni salida.
¿Pero sabes cuál es la buena noticia dentro de toda la oscuridad de tus preocupaciones? ¡Que puedes llegar a la luz si realmente te lo propones! Y lo veremos más abajo, pero antes vamos a ver de dónde pueden nacer esas preocupaciones que van llenando tu mochila. Esto es importante para que sepas identificar el problema y puedas atajarlo desde la raíz.
Los motivos; las piedras de tu mochila
¿Recuerdas que hemos hablado que las preocupaciones llenan tu mochila de cosas negativas? Pues ahora vamos a ver los motivos de esas preocupaciones, que son como las piedras que van llenando esa mochila y que hacen que cada día te pese mucho más.
Y es que, dentro del mundo de las preocupaciones, debes saber que estas pueden venir a raíz de muchos motivos, y es importante que sepas analizar de dónde vienen para poder atajar el problema.
Para ello, hemos resumido algunos de los motivos más comunes que causan preocupaciones difíciles de gestionar en la vida de las personas:
- Motivos personales. En este caso, te sientes agobiado/a porque no encuentras la solución a tus problemas personales. Sientes que el tiempo pasa y que las cosas se ponen cada vez más difíciles, y eso te lleva a imaginar millones de fantasmas que rondan por tu cabeza.
Además, quieres hacer las cosas de forma diferente, pero, cuando te decides, piensas que todo va a salir mal y prefieres quedarte como estás. ¿Qué ocurre? Que sabes que quieres hacer otra cosa pero algo te frena, por lo que entras en un bucle de conflictos internos que no te dejan descansar. Aparece la procrastinación; no haces lo que sabes que deberías hacer para sentirte bien y te sientes peor.
- Motivos familiares. En este caso, hay problemas familiares que no puedes o no sabes gestionar. Eso puede abarcar desde la enfermedad de un familiar, las discusiones constantes con tu pareja o tus hijos, la falta de relaciones sociales o cualquier otro motivo familiar que te esté afectando.
¿Qué ocurre? Que sientes una profunda tristeza, un sentimiento de vacío, una sensación de soledad o una necesidad de cortar lazos familiares que no estás pudiendo llevar a cabo.
- Motivos empresariales. En este caso, hay problemas empresariales o conflictos laborales que no puedes gestionar. Pueden ser ventas que no llegan a ser las necesarias, colaboradores que no trabajan motivados y miran por sus intereses, equipos que no responden como deberían… Todo eso puede causar retrasos en las entregas, problemas internos e incluso quiebras y llevarte a luchar una batalla diaria con el personal y con los clientes.
Es posible que sientas que te pasas el día apagando fuegos y que te falta tiempo, por lo que puedes acabar por descuidar tu salud y tu familia, sumando todavía más problemas.
Como ves, estos son solo algunos ejemplos de motivos de preocupaciones que nos encontramos cada vez más. Y es que esas preocupaciones llegan a volverse como una gran bola de nieve que te atrapa, te aplasta y hace que no puedas levantarte.
Ahora dinos… ¿Te sientes identificado con alguno de los puntos anteriores? Pues déjanos decirte que has llegado al lugar indicado, coachee. ¿Por qué? Porque todo lo anterior tiene solución si realmente quieres ponerla.
¡Veamos!
La libertad y el alivio de soltar tu mochila
Antes de seguir, déjame decirte que no es necesario que te agobies más. Todo lo anterior es solo un resumen de cómo te sientes, pero ahora sabes que hay una oportunidad de cambio y que puedes aprender a salir de la cueva.
Porque sí, coachee, es muy importante que sepas que detrás de la oscuridad - o de una mala época llena de cargas y preocupaciones - siempre hay una luz que brilla e ilumina el camino de salida.
Y es que, cuando logras quitarte esa mochila cargada de preocupaciones, empiezas a entender qué es la libertad y a sentir esa sensación de alivio tan maravillosa. ¡Como el que se quita una gran losa de encima!
¿Y sabes qué sientes y qué logras cuando lo haces?
- Una sensación de alivio, de calma y de paz.
Porque quitarse la mochila de las preocupaciones puede significar un gran cambio en tu vida personal y profesional y es la clave para empezar a vivir la vida que quieres.
¿Quieres saber cómo consiguen nuestros coachees esa libertad?
Zurekin Coach; la luz guía para salir de la cueva
Si antes hablábamos de las preocupaciones y de los motivos que hacen que lleves esa mochila siempre pegada a tu espalda, haciéndote sentir el peso de tus problemas y bloqueando tus pasos, ahora vamos a hablar de todo lo que puedes conseguir cuando decides soltar la mochila y ponerte a trabajar para mejorar tu vida con Zurekin Coach.
Y es que son muchos los coachees que llegan a Zurekin Coach desesperado/as, agobiado/as y con una sensación de bloqueo que rige sus vidas, pero sabiendo que hay una luz guía que puede ayudarles a salir de la cueva. ¡Justo eso hacemos en Zurekin Coach! Porque entendemos la complejidad de estas situaciones y estamos aquí para ofrecer esa luz, esas herramientas, ese acompañamiento cercano, de confianza y auténtico que tanto necesitas.
¿Que cómo lo hacemos? ¡De forma sencilla y agradable, que es lo más importante!
- Primero te ayudamos a reconocer y validar tus emociones. Debes entender que es normal sentirte abrumado y agotado cuando te enfrentas a situaciones difíciles y que buscar ayuda para superarlas es la mejor opción.
En esta etapa trabajamos para conocernos, para ofrecerte un espacio seguro y acogedor donde expresarte libremente y poder reconocer tus emociones.
- En esta segunda etapa, donde ya has reconocido tus preocupaciones, trabajamos juntos para identificar las causas-raíz de tus problemas y desarrollar estrategias efectivas para abordarlos.
Te ayudamos a aprender nuevas habilidades de superación, a establecer límites saludables y a mejorar la comunicación en tus relaciones personales y profesionales. ¡Es una etapa emocionante!
- En la tercera etapa, donde ya tienes las herramientas que necesitas para superar tus desafíos actuales, te enseñamos cómo enfrentar desafíos futuros con confianza y determinación para que puedas hacerlo solo/a.
Trabajaremos para que puedas aprender a adaptarte a los cambios y a encontrar oportunidades de crecimiento incluso en medio de la adversidad. ¡Verás qué giro da tu vida!
Y con este proceso de autodescubrimiento y transformación, llegará la sensación de libertad que tanto buscas; la libertad de dejar atrás el peso de tus preocupaciones y de abrazar el presente con alegría y gratitud.
Y empezarás a vivir tu vida según tus propios términos, eliminando el peso del pasado y las preocupaciones del futuro. ¡Podrás ser verdaderamente tú mismo/a!
Además, con nuestro proceso 360º, podrás conseguir todo esto:
- Mayor bienestar emocional y sensación de paz.
- Mejorar las relaciones interpersonales y fortalecer lazos familiares.
- Más autoconfianza; tu autoestima crecerá.
- Tomarás decisiones de forma efectiva con total claridad.
- Podrás superar desafíos, adaptarte a las situaciones y ser resiliente.
- Tendrás sensación de libertad y control; vivirás tu vida según tus criterios.
- Mejorarás tu calidad de vida en todos los ámbitos posibles.
Entonces… ¿Tú también quieres conseguir todo lo anterior? Nosotros ya hemos hecho este proceso y podemos asegurarte que, algo que parece tan difícil, se vuelve realmente agradable cuando cuentas con ayuda profesional y logras celebrar tus éxitos con quien te guía.
Así que te esperamos con los brazos abiertos para dar a tu vida ese giro de 360º que tanto buscas.
¿Empezamos?
